GRITAR EN LOS PULPITOS NO ES CRISTIANO.
Los cristianos debemos de seguir el ejemplo de Cristo, cuando él
estuvo aquí en la tierra; él no discutió, nunca busco ser protagonista o
famoso, ni gritó en ninguna parte para ser oído. Los predicadores que gritan para
hacerse famosos, no son verdaderos cristianos, porque no imitan a nuestro Señor
Jesucristo. Veamos: Mateo 12:15 al 19. Jesús lo supo y se alejó de allí,
pero muchas personas lo siguieron, y él sanó a cuantos estaban enfermos. Pero
les pedía insistentemente que no hablaran de él. Así debían cumplirse las
palabras del profeta Isaías: Viene mi siervo, mi elegido, el Amado, en quien me
he complacido. Pondré mi Espíritu sobre él, para que anuncie mis juicios a las
naciones. No discutirá, ni gritará, ni se oirá su voz en las plazas. (Versión BL95).
La misma biblia nos enseña que gritar es sinónimo de rebeldía y
sedición, los judíos gritaron para que crucificaran a nuestro Señor Jesucristo,
como una connotación de odio hacia Dios. Veamos. Lucas 23:21. Pero ellos se pusieron
a gritar:—¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!. (Versión Biblia al Día = BAD).
El gritar en los púlpitos es sinónimo de odio, enojo, y desacuerdo, por eso los predicadores cristianos no deben de gritar dentro de las iglesias. Los Judíos
gritaban para que crucificaran a Cristo y que soltaran a un bandido como
Barrabas. Veamos: Juan 18:40 —¡No, no sueltes a ése; suelta a Barrabás!
—volvieron a gritar desaforadamente. Y Barrabás era un bandido. (Versión Biblia al Día =
BAD).
La Palabra de Dios enseña también que el gritar es un inicio de que
la gente sé enfurece en contra de los que predican el evangelio de Cristo, y en
contra de Dios, defendiendo su religión idolatra. Por eso mismo el cristiano no
debe gritar. Veamos: Hechos 19:28. Al oír esto, se enfurecieron y comenzaron
a gritar:—¡Grande es Artemisa de los efesios!. (Versión Biblia al Día =
BAD).
De acuerdo a Apocalipsis,
el gritar es sinónimo de castigo, terror, y de juicio. Por eso los predicadores
tienen que entender que gritar no es preciso para enseñar el evangelio de paz, de
gozo y de gracia en Cristo Jesús. Veamos: Revelación 18:10.
Aterrorizados al ver semejante castigo, se mantendrán a distancia y
gritarán:«¡Ay! ¡Ay de ti, la gran ciudad, Babilonia, ciudad poderosa, porque en
una sola hora ha llegado tu juicio!». (Versión Biblia al Día =
BAD).
DIOS BENDIGA SU VIDA. AMEN.